Algunos habréis oído ese nombre puede que una o dos veces, pero para otros será la primera vez. Y por esto, sencillamente, es por lo que desaparece.
El Ros Casares es un equipo de BA-LON-CES-TO. FEMENINO.
Reciente Campeón de la Euroliga (es decir, la Champions del Baloncesto femenino).
Reciente Campeón de Liga (vamos, como el Real Madrid...sólo que en Baloncesto, y de chicas).
Heredero de otros dos clubes femeninos (Popular Bàsquet Godella y CB Godella) en 1999 comenzó un proyecto que ha durado 13 años. Durante este tiempo ha ganado 1 Euroliga, 8 Ligas, 7 Copas de la Reina y 6 Supercopas de España.
Por sus filas han pasado grandes jugadoras internacionales como Silvia Domínguez, Laia Palau y Sancho Lyttle que, ahora mismo, deben buscarse un nuevo equipo.
El año pasado, por estas fechas, comenzó un ambicioso proyecto con un objetivo principal: conseguir la Euroliga. El Ros ya había perdido la final europea dos veces, en 2007 y 2010, ambas contra el Spartak de Mocú. La última fue en casa, en Valencia, ante unos cuatro mil aficionados. El Ros quería la Euroliga y fueron a por todas.
El 1 de abril el Ros Casares se enfrentó al Rivas Ecópolis (de Amaya Valdemoro) en la primera final española de la historia. Ganaron las valencianas 52-65 y el ansiado trofeo ocupó su lugar en las vitrinas del club. Por fin se convertían en el mejor equipo de baloncesto femenino europeo. Pero la alegría ha durado un par de meses y en un comunicado el Ros Casares ha anunciado que deja el baloncesto de élite. No hay patrocinador. No hay dinero. Se necesita mucho para sostener un equipo campeón de Europa, y el Ros Casares no lo tiene.
La desaparición del equipo significa una plaza vacante en la Liga, que por derecho le corresponde al Obenasa de Liga 2. Lo sorprendente de esta noticia es que en el equipo navarro no se plantean subir si no aparece un patrocinador. Mejor continuar en segunda con un proyecto de futuro que subir a primera para no poder mantenerlo. De nuevo, no hay dinero.
¿Os imagináis que el Villarreal desaparece y el Dépor dice que mejor se queda en Segunda? Es inimaginable e incomparable. Dos mundos que no tienen nada que ver. Y no lo digo porque sea masculino o femenino. Y si no que se lo digan al Lucentum Alicante, de la Liga Endesa, que también puede desaparecer en los próximos días.
Porque mientras las canchas de los colegios y los clubes siguen llenándose con chavales que aman el Baloncesto, en el deporte de élite los equipos tienen cada vez más problemas para continuar. Una cosa es jugar por diversión y otra depender de un patrocinador para que exista o no tu equipo. Hasta siempre Ros Casares. Lo mismo en unos años aparece alguien que apueste por ti, como por aquel Godella, primer equipo español en ganar la Copa de Europa. Tú has ganado otra. Ojalá, algún día, lleguen muchas más.
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